Qué es el Benchmarking y cómo puede ayudar a tu Empresa
¿Cómo puedo ser mejor que mis competidores? Si te preguntas eso, debes conocer el benchmarking.
Estimar el valor de una compañía no es algo que pueda hacerse a la primera. Por suerte, hay algunos métodos efectivos para ello.
EmprendedurismoYa sea que quieras vender tu compañía, sumar socios o simplemente valorizarla, lo primero es saber cómo se calcula el valor de una empresa. Si bien existen muchas maneras para hacerlo, a continuación, te mostramos algunas de las más utilizadas para que, a la hora de estimar cuánto vale tu compañía, lo hagas de la manera correcta.
Como dueño o administrador de una empresa, de seguro sabrás la complejidad de las operaciones corporativas. Realizar flujos de caja, balances financieros, analizar estrategias y evaluar el rendimiento de las distintas áreas que la componen son solo algunas de las tareas cotidianas que implica estar a la cabeza de una organización.
Sin embargo, si quieres venderla o realizar modificaciones a nivel de socios o accionistas, tendrías que estimar su peso en el mercado. En ese sentido, ¿sabes cómo se calcula el valor de una empresa? Toma nota:
Se trata de uno de los principales métodos de valoración de empresas, debido a su precisión y estandarización. Básicamente, este camino permite asignar determinado valor a una compañía a través de los movimientos financieros que, a futuro, tendrá dicha entidad.
Para lo anterior, es necesario establecer un umbral de tiempo que, idealmente, no debe superar los 20 años. Este plazo permite visualizar cambios importantes en el mercado y proyectarlos para establecer el valor de la empresa. Luego, se descuenta su valor a precios que respondan al presente.
Luego de establecer el plazo, es necesario considerar el factor riesgo o, en otras palabras, la tasa de riesgo del proyecto, la cual está determinada por 3 variables de suma importancia:
Hablamos de un método que implica 3 etapas:
Finalmente, el valor de la empresa será el resultante de la suma del valor de los flujos anuales con el valor perpetuo, descontando las deudas de la compañía.
En concreto, la valoración por múltiplos realiza una comparativa con otras empresas del sector -es decir, la competencia- para determinar el valor de tu compañía. Hablamos de un sistema que solo puede ser aplicado a entidades consolidadas, con un desempeño y crecimiento estables.
Para ponerlo en práctica, necesitas considerar algunos parámetros -como el beneficio bruto de explotación obtenido previo a la deducibilidad de los gastos financieros (Ebitda), el beneficio antes del impuesto (BAI) o las ventas, entre otros-, para luego valerse de los indicadores estándar del rubro que, habitualmente, responden a empresas cotizadas.
Se trata de una forma de valorizar una empresa más sencilla que las anteriores, ya lo hace considerando el precio del patrimonio material de la compañía, más la rentabilidad obtenida del rendimiento a futuro.
Dicho rendimiento, conocido también como Fondo de Comercio o Goodwill, puede arrojar dos caminos dependiendo de los criterios con que se valorice:
Finalmente, el precio asociado al Goodwill estará determinado por la capitalización del sobre rendimiento futuro.
Ahora que sabes cómo se calcula el valor de una empresa, la recomendación es preocuparte por su estabilidad. Así, conseguirás una mejor valorización.